Dudo que sirva para divulgar nada, pues ni soy divulgador, ni lo pretendo; de hecho, soy bastante reacio a promocionar cualquier cosa, incluso mi propia obra. Pero sí sé lo ilusionante y frustrante que es intentar llevar a cabo un proyecto creativo al margen, consciente de que apenas nadie le prestará atención ni le dará una oportunidad, lo cual no deja de evidenciar la ausencia de curiosidad y el ninguneo que experimenta la obra de todo autor y autora fuera de un ámbito más o menos mediático. ¿Cómo sobrevivir a dicha invisibilidad? ¿Resignándose? ¿Marginándose más allá de la marginalidad a la que le condena su ilusión y su falta de apoyo mediático y empresarial? Supongo que lo mejor es ignorarla y dar cuerpo visible al proyecto, buscando medios que lo posibiliten y lo den a conocer, cada quien dentro de sus posibilidades y de su capacidad para luchar contra el “imposible” que, con mucho trabajo y no menos fortuna, quizá pierda el “im”. De otro modo, sin la posibilidad de que se conozca, sería como si una creación no existiese o no formase parte del ámbito artístico y cultural al que pertenece; dicho de otro modo: al carecer de apoyo y de canales de difusión, no alcanza a un público amplio. Pero los quijotes de turno no desesperan y continúan lanzándose a la aventura sin más armadura que la ilusión de salir victoriosos, lo cual sí sería toda una gesta, y ese intento ya merece mi respeto y mi simpatía. Además, siempre resulta una satisfacción ver que existen personas que pretenden sacar adelante sus proyectos creativos, pensando menos en la posibilidad de dinero, que en la necesidad de expresarse y dar forma a sus ideas. Esto último parece ser lo pretendido y conseguido por Jaxsa y su equipo artístico y técnico en la serie Producto Local (2025), un grupo que desconozco, pero que imagino quijotesco frente a los numerosos obstáculos que surgen en todo camino creativo a contracorriente. El suyo se inició hacia finales de 2021 —el rodaje se prolongó hasta 2024–, cuando, sin más presupuesto que el que llevaban en el bolsillo, empezaron a trabajar en su serie o película dividida en ocho capítulos. En todo caso, se trata de una historia sobre personas; lo cual, a día de hoy, ya es decir bastante. Esos hombres y mujeres habitan en la Margen Izquierda (Ezkerraldea), cuyo nombre proviene de su situación geográfica en la ría de Bilbao, una zona que supongo sienten suya, pero que también les desubica y ubica a partes iguales, siempre en conflicto… Por lo leído y escuchado sobre la serie, parece que sus personajes intentan sobrevivir en los tiempos que corren, sin poder dejar atrás el pasado, ni alejarse de la depresión económica de una zona antaño de auge industrial, en la que algunos de sus protagonistas sintieron, tal vez, comerse el mundo. En todo caso, sin entrar a valorar el resultado de Producto Local, pues no la he visto, les deseo suerte y la mejor de las recepciones y recorrido para su serie, porque cualquier proyecto creativo en el que se ha invertido ilusión y trabajo merece su oportunidad de llegar al mayor número de personas posible, y que sean estas quienes la juzguen; y no un divulgador, ni un supuesto experto que lo haga en lugar de ellas…
Sinopsis de Producto Local (texto de Jaxsa, el director de la serie):
<<La serie Producto Local explora el resultado (producto) de las vidas de hombres y mujeres que vivieron la realidad de los años 80 y que, en la actualidad, no han logrado adaptarse a los nuevos tiempos. Los protagonistas conforman una familia atípica compuesta por dos hombres y un joven, en un contexto de homosexualidad no aceptada ni socialmente ni por ellos mismos. La realidad de los dos personajes principales, las decisiones tomadas en el pasado y sus consecuencias en la actualidad son el eje central de la historia. Todos ellos buscan escapar de la difícil vida que han arrastrado durante años, con la esperanza de ofrecer un futuro mejor a su “hijo” no biológico.
En la serie se reflejan algunos temas muy presentes en la sociedad actual. Uno de los temas vertebrales de Producto Local es el maltrato estructural hacia la mujer, presente tanto en las protagonistas como en personajes secundarios que también son víctimas de esta lacra. Una joven, madre de una niña de 10 años, se ve obligada a prostituirse para mantener a su familia. En este entorno dramático, los derechos de los niños se ven vulnerados por la falta de cuidados y acompañamiento.
Los personajes de Producto Local viven bajo el umbral de la pobreza debido a la precariedad laboral que sufren. Tanto la paternidad como la maternidad son un foco central de la narrativa, ejercidos de forma torpe y con efectos perniciosos para los hijos. La serie presenta el abandono de los menores a cargo de unas familias que, debido a sus circunstancias, son incapaces de ofrecer apoyo y un entorno seguro para la crianza. Asimismo, se muestran con frecuencia escenarios del pasado industrial de Bizkaia, la margen izquierda y los barrios altos. Donde antes hubo empleo, ahora se desarrollan los trapicheos y la vida cotidiana de los personajes.>>