Las aventuras coloniales del ejército británico en la India tuvieron en la década de 1930 sus mejores producciones, excelentes films que entretienen al espectador desde la primera escena hasta el clásico the end. Tres lanceros Bengalíes (The Lives of a Bengal Lancer) es un excelente ejemplo de este tipo de película en la que los soldados británicos son los héroes que deben enfrentarse a fuerzas hostiles que les rechazan constantemente, levantamientos de insurrectos que pretenden expulsar a un ejército invasor que controla unos territorios alejados que no les pertenecen, pero en los que se han instalado como consecuencia de un colonialismo desmedido, fruto de la necesidades económicas y políticas que rigen a los gobiernos de las potencias europeas. La historia que filmó Henry Hathaway se centra en tres oficiales del 41º Regimiento de Lanceros Bengalies, perteneciente al ejercito de su Majestad, destinados en la frontera de la India. MacGregor (Gary Cooper), soldado experimentado de origen escocés-canadiense, no comprende a un coronel que sigue el reglamento por encima de todo, circunstancia que a ojos de Mac le convierte en un ser frío e incluso incompetente. Forsythe (Franchot Tone) y Stone (Richard Cromwell) acaban de unirse al regimiento, este último resulta ser el hijo del coronel, y semeja ser el vértice más débil del triángulo formado por los tres lanceros. Por contra, Forsythe es la viva imagen del caballero inglés, aparenta buenos modales, un fino sentido del humor y se cree superior al resto de sus compañeros. Se muestra como un teniente pulcro, ególatra y un poco bromista, que inicialmente choca con la personalidad de Mac, pero que acaba sintiendo verdadero aprecio por el canadiense. Stone, en apariencia el más débil, mantiene una lucha interna que le enfrenta a los sentimientos que desata su relación paterno-filial; está convencido de que su padre, el coronel Stone (Guy Standing), le trata de una manera injusta y abusiva, reflejo de la decepción que su progenitor sienta hacia él. Desde el principio se intuye que entre estos tres soldados nacerá una amistad inquebrantable, que les obligará a protegerse mutuamente, llegando incluso a arriesgar sus vidas para salvar la de sus compañeros. Este pacto no escrito, convence a MacGregor para que asuma su rol de veterano y se convierta en el ángel custodio de Stone, a quien observa perdido y en constante lucha con esos sentimientos enfrentados que no le permiten asumir sus funciones. Sin embargo, son soldados, deben olvidar sus problemas personales, porque se encuentran en un territorio hostil, un polvorín a punto de estallar como consecuencia del levantamiento de tropas rebeldes que pretenden derrotar y expulsar a ese ejercito colonial británico que se ha asentado en su país. Estas tribus, tienen un líder, un hombre que ha trazado un plan, que consiste en hacerse con armas y municiones británicas. Por suerte, el servicio de inteligencia británico ha descubierto la estratagema del jefe de los insurrectos y ordena el traslado del 41 Regimiento al feudo de uno de sus aliados, lugar donde se encuentra el líder de los insurrectos, para así poder controlar los movimientos que se produzcan durante el traslado de las armas.
Tres lanceros bengalíes es una estupenda oportunidad para disfrutar de la aventura sin prejuicios, en ella se descubre el significado de la camaradería o el enfrentamiento entre el amor (padre-hijo) y el deber, porque para hombres como el coronel Stone el regimiento está por encima de todo. Cuestión que MacGregor ni se plantea, tiene clara su opinión, quien antepone un ejército a su propio hijo no es un verdadero hombre, opinión contraria a la del mayor Hamilton (C.Aubrey Smith), quien defiende y alaba el comportamiento de ese coronel intransigente, aduciendo que gracias a hombres como el oficial al mando la India les pertenece. El enfrentamiento moral está servido. ¿Quién está en posesión de la razón? Eso es algo que cada uno de ellos debe decidir y actuar en consecuencia; del mismo modo que los tres lanceros deben decidir entre el deber y la amistad en medio de una situación límite en la que sus vidas correrán serios peligros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario