viernes, 27 de junio de 2025

La tercera generación (1979)


Los títulos de crédito de La tercera generación (Die dritte generation, 1979) laten al compás del sonido de los latidos que los acompañan como fondo sonoro. Así abre Rainer Werner Fassbinder lo que denomina “comedia”, pero en alguien atípico como él, los géneros se confunden y escapan a sus límites comunes, aunque en su cine emplee estereotipos y melodrama. Hay una frase que apunta el porqué usar modelos de representación comunes que el da forma personal. <<La verdad es una mentira […] Las mentiras se disfrazan de ideas y de verdades>>, dice P. J. Lurz, el ejecutivo interpretado por Eddie Constantine, cuando explica el porqué le gusta Solaris (Solyaris, Andréi Tarkovski, 1972). Le gusta porque Tarkovski crea una mentira a partir de la obra de Stanislaw Lem para dar forma a sus ideas y su verdad, que no deja de ser la mentira que es la representación, en la que todo está preparado y obedece a una finalidad. Y eso es lo que también se observa en La tercera generación, que se construye sobre el esfuerzo del cineasta, que también asumió labores de producción, guion y fotografía, para realizar una crítica a la nueva generación, la que debe tomar el relevo. El resultado depara la mentira cinematográfica, sátira de la realidad, aunque la burla y el humor de Fassbinder no inviten a la risa; tal vez porque se tomase demasiado en serio a sí mismo, en su función de “genio” y “artista” comprometido, en busca de desvelar verdades y aspectos sociales, económicos y políticos incómodos en una Alemania Federal plenamente integrada en la economía de mercado. La sátira de Fassbinder, una de las pocas que realizó, me aburre, pero eso no deja de ser opinión. Más objetivo resulta decir que se centra en un supuesto grupo terrorista, mostrando a sus miembros en conjunto y por separado en una cotidianidad que apunta que su rebeldía no es más que su manera de ocultar su sumisión a la clase burguesa a la que pertenecen, lo cual no deja de ser una de las realidades que cualquiera país económicamente desarrollado e industrializado viene arrastrando desde mediados del siglo pasado…



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