Escrita en 1904, Nostromo es una de las novelas más populares de Joseph Conrad, y también un punto de inflexión en su obra literaria. El escritor británico-polaco narra en ella el nacimiento del estado de Sulaco, que se gesta dentro un país ficticio, Costaguana, en el que los intereses de empresas extranjeras y de los hombres más poderosos marcan el devenir de la nación y de todos sus ciudadanos. Paralelo a esta circunstancia, que enfrenta fuerzas antagónicas —colonialismo e independentismo—, se encuentra el eje más importante del relato, la interioridad de sus personajes principales, hombres y mujeres con ideales, sueños u obsesiones que les obligan a actuar del modo en el que lo hacen. Creo que las siguientes palabras de Virginia Woolf podrían explicar el salto que implica esta novela, en la que Conrad interioriza en sus personajes; es decir, prioriza sus interioridades sobre la relación que mantienen con el medio natural donde se desarrolla la aventura y el conflicto, aunque el espacio no pierde presencia. <<Hasta que escribió Nostromo, sus personajes, como los jóvenes percibieron muy pronto, eran fundamentalmente sencillos y heroicos, por más sutil que fuera la mente e indirecto el método de su creador. Eran marinos, acostumbrados a la soledad y el silencio. Estaban en conflicto con la naturaleza, pero en paz con los hombres…>> (1) Ahora, en Nostromo, ya no están en paz ni siquiera consigo mismo, ya viven un conflicto más allá del que supone al marino enfrentado a la naturaleza. Esto ya se observa en Nostromo, nombre del capataz de los armadores del puerto, que vive pendiente de su imagen y del renombre que se ha ganado (alcanzado desde la nada), gracias a sus méritos y su fidelidad para con quienes trabaja. También en el señor Gould, el propietario de una concesión minera a perpetuidad, de la que se extrae la plata que representa la mayor riqueza del lugar.
De origen inglés y educado en Inglaterra, algo que se nota en su personalidad, Gould hereda la mina, herencia de un padre obsesionado por dicho yacimiento, que le produce un efecto obsesivo similar al de su progenitor, aunque contrario, pues, donde al finado le producía un rechazo irracional, al joven Gould le produce una atracción que atrapa todos sus sentidos. Su alma, sus pensamientos se centran en la extracción del metal. No son libres, hecho que le lleva a poner en un segundo plano a su esposa, la señora Gould, mujer admirable, a quien todos respetan. Ella le ama sin concesiones de ningún tipo. A medida que avanza el relato se comprende la gran importancia de este personaje para la consecución de los propósitos de los independentistas de Sulaco, gracias a su influencia sobre el doctor de la compañía minera, un hombre que produce desconfianza, pero que guarda en su interior un secreto que le convierte en pieza vital del juego. Así mismo encontramos en Martin Decoud a un periodista que ha permanecido durante un largo periodo en Europa, en concreto en Francia, donde las ideas libertarias han influenciado su pensamiento. Esas ideas ilustradas y románticas, que rigen su visión del mundo, le permiten ver en la posibilidad de la independencia una mejora en la calidad de vida, que se debe sustentar en la gran riqueza de la zona y que se traduce en el arriesgado plan que Nostromo y él mismo deben llevar a cabo. En 1917, trece años después de su gestación, Cobrad escribe que <<Nostromo es la mas ansiosamente meditada de las novelas largas correspondientes al periodo posterior a la publicación del volumen de relatos, Tifón>>, a lo que añade: <<No quiero decir que fuese consciente entonces de ningún cambio inminente en mi pensamiento y en mi actitud hacia las tareas de mi vida literaria.>> Pero algo estaba cambiando y ese algo fue que le <<pareció como si no quedase nada más en el mundo sobre lo que escribir.>> (2) Mas para Conrad, que había navegado mares y vivido numerosas aventuras, el viaje literario no había concluido, solo había que superar esa calma chicha a la espera de que el viento creativo llenase las velas.
El nuevo viaje literario del autor de Lord Jim (1900) sería al tiempo físico y emocional, recorriendo los espacios exteriores, pero también deteniéndose en los conflictos humanos y personales que, hasta la gestación de Nostromo, habían permanecido en un plano latente. A lo largo de las páginas de la novela, Conrad muestra la gestación de las ideas en las mentes de las personas implicadas, y como éstas confluyen para unirse en una idea superior y arriesgada, la independencia de una región que se encuentra aislada del resto de un país, que sufre el constante abuso de dictadores sangrientos y ajenos a las necesidades del pueblo, lo que lleva a la nación a un interminable enfrentamiento entre los diferentes intereses existentes. A pesar de que la acción se desarrolla en un espacio ficticio, se puede reconocer en su ubicación cualquier país que haya sufrido este tipo de abuso, legado de unos conquistadores que únicamente se había preocupado de llenar la saca y que se convirtió en una tradición tras la independencia. De este modo, la historia imaginaria, puede traducirse en un relato realista, profundo, que bien pudo producirse (de hecho la idea se gestó muchos años antes de su escritura, cuando Conrad tuvo noticia de un hecho singular y verídico que cobra gran importancia en el relato) y cuyos personajes muestran una humanidad y una confusión interna perfectamente descrita por un maestro en el arte de narrar el estado de ansiedad que domina a sus personajes y que permiten reconocer en Nostromo los diferentes puntos de vista que habitan en ellos.
(1) Virginia Woolf: El lector común (traducción de Daniel Nisa Cáceres). Debolsillo, Barcelona, 2010.
(2) Joseph Conrad: Nostromo (traducción de Alberto Adell). Alianza Editorial, Madrid, 2008.
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